"ANDAR Y MUCHO, HABER VISTO Y
ESCUCHADO MUCHO MÁS, ESCRIBIR Y CONTAR"
por Ricardo Luis Acebal
Estas palabras, que le "robé" de su prólogo al libro de Zabala al sabio Luis Alposta (médico, poeta, letrista,
escritor, conferencista, pintor...) creo que son las que mejor resumen el serio y
responsable trabajo del autor de esta obra de imprescindible lectura. Sobre
todo en estos días, en que parece que absolutamente todo lo que se diga o se
cante dura lo que un "mensajito de uasá".
El decir del payador tiene hoy absoluta vigencia, así como "El gaucho
Martín Fierro" (que payaba ¡y cómo!) la tiene. Aún cuando en los primeros días
de diciembre de este 2022 ha cumplido ciento cincuenta años de su presentación
en Buenos Aires (1872).
Abel Zabala incluye en "Este Trabajo" (pag. 16) las observaciones que José
Hernández estampa en las "Cuatro palabras de conversación con los lectores"
como prólogo de la segunda parte de su "Martín Fierro" (1879) al hablar del
gaucho:
Canta porque hay en él cierto
impulso moral, algo de métrico, de rítmico, que domina en su organización, y
que lo lleva hasta el extraordinario extremo de que todos sus refranes, sus
dichos agudos, sus proverbios comunes, son expresados en dos versos octosílabos
perfectamente medidos, acentuados con inflexible regularidad, llenos de
armonía, de sentimiento y de profunda intención.
A lo que agrega Zabala: "Y no quiero que pase desapercibida esta alusión de
Hernández a una práctica antiquísima, propia de la transmisión oral: el uso de
la poesía gnómica, ese género del magisterio sapiencial que acaudala máximas
puestas en verso como auxiliar de la memoria."
El índice resume el polifacético contenido del libro. Lo incluyo en esta
nota con las palabras introductorias de Abel Zabala:
"En esta obra, animado por el afán de hurgar en el fenómeno desde su misma
entraña gestadora, doy la palabra a los propios protagonistas: son diez
payadores rioplatenses... y un monje benedictino apegado a empuñar el habla de sus
paisanos para transmitir la Palabra de Dios."
Abel Soria dialogando con Abel Zabala en San José de Mayo, Uruguay, en 2009