EN EL NOMBRE DE LA VIDA
por Ricardo Luis Acebal
Las noticias publicadas en la Provincia de Jujuy en febrero de 2019 indicaban: "Desde hace bastante tiempo atrás las comunidades kollas de las Salinas Grandes y la Laguna de Guayatayoc , en la Provincia de Jujuy, vienen movilizándose en defensa de su territorio, y es desde hace pocos días que las 25 comunidades definieron a esta zona como "patrimonio cultural ancestral y natural de los pueblos originarios" para garantizar su cuidado, conservación y protección, "para que ningún proyecto megaminero se desarrolle en nuestro territorio".
En los primeros días de febrero, cuando vieron que comenzaron a instalarse maquinarias diversas en el territorio, se pusieron firmes y más de 300 personas de la asamblea se vieron obligadas a frenar a las empresas (Ekekos SA y Ais Resources Limited) y hacer que retire dichas maquinarias y operarios del territorio".
"En el nombre del litio", al reflejar esa lucha con muy buena calidad de Cine, una vez más interroga acerca de cuál es el beneficio que acarrea a nuestros paisanos de "zonas mineras" la explotación de recursos que trae aparejada una desertización de suelos, con un formidable gasto de agua y con cero ganancia para la provincia por la comercialización de lo que se extrae.
Está claro que salvo autoridades ejecutivas provinciales (gobernador y algunos integrantes de su círculo íntimo) que al dar su autorización para estas explotaciones "megamineras" son recompensados con jugosos fondos que seguramente integran alguna cuenta en ciertos paraísos fiscales y unos cuantos puestos de trabajo que no solucionan ni mucho menos el drama del desempleo, otra "ganancia" no hay. Son puras pérdidas, justificadas por los presuntos modernistas con el verso repetido de emplear "alta tecnología en la explotación del suelo".
En el caso de esta película se plantea nada más y nada menos que el aniquilamiento de las culturas ancestrales de los pueblos puneños, desconociendo olímpicamente disposiciones provinciales que "garantizaban" el derecho al territorio de las comunidades originarias.
Y, como ya se expresó, a cambio de nada para nuestro país y todo para las multinacionales, que se llevan el mineral sin control nacional para sus centros de poder.
Salinas Grandes y Laguna de Guayatayoc: comunidades firmes por la autodeterminación.