LA HISTORIA DE UNA PASIÓN DEPORTIVA Y SOLIDARIA
por
Ricardo Luis Acebal.
La primera época de su
realización transcurrió entre 1949 y 1954.
La segunda se desarrolló
entre 1973 y 1975.
La tercera fue la más
prolongada: desde 2004 a 2015.
Primeros juegos, con Evita dando el puntapié inicial.
Víctor Santa María
expresa en su prólogo: "El deporte es una herramienta política, quizá
la más eficiente que un gobierno pueda poner a disposición de su Pueblo. Sin
lugar a dudas, la etapa histórica en la que mayor trascendencia se le dio al
deporte, como política de Estado, fue durante la primera y la segunda
presidencia del general Perón. Entre el 45 y el 55, el gobierno incorporó a la
actividad deportiva a miles de jóvenes, organizó competencias nacionales e
internacionales, fomentó la creación y el desarrollo de numerosas instituciones
deportivas y apoyó la participación de gran cantidad de deportistas de alto
rendimiento en competencias internacionales de gran relevancia. Tanto es así,
que la retórica peronista de aquel tiempo sostenía que el deporte era el camino
que debían transitar todos los jóvenes durante su formación, para llegar a
convertirse en mejores personas y definió a los clubes como "Escuelas de Vida".
Fue en este contexto
social y político donde nacieron los Juegos Evita. Esta competencia surgió de
la innovadora idea del doctor Ramón
Carrillo de crear un evento social que reuniera la mayor cantidad de chicos
y jóvenes para realizar muestras médicas, y así obtener estadísticas
fehacientes del estado de salubridad de los mismos."
Evita le pone la firma a la pelota, con Perón de privilegiado testigo. Los juegos comenzaron en 1948 con un torneo de fútbol que incluyó a la Capital y al Gran Buenos Aires, y al año siguiente se convirtieron en los Juegos Nacionales Evita.
Dieguito "Pelusa" Maradona y todo el plantel de los Cebollitas Porteños fueron invitados a Pinto y allí viajaron, dos meses después de que los chicos santiagueños les ganaran en las semifinales de Embalse 1973. Aquí Diego con el mayor de los hermanos Ganem.
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