Roberto Iriarte, editor de "Cirquero" y autor y editor de "El Gran Circo del Arca" (Foto: Ricardo Acebal).
"EL CIRCO SIEMPRE ES MUY GRANDE...
-aunque sea muy pequeño - grande como el Paraíso
Terrenal, del que tiene toda la ingenuidad, la claridad y la gracia primitiva y
edénica"
expresa el escritor español Ramón Gómez de la Serna en
su libro "El Circo", editado en 1917.
Estos conceptos forman
parte del "Comentario final o prólogo mal ubicado" que firma Roberto Iriarte
(ver en esta misma sección "Libros" la nota Roberto
Iriarte, cuentero del lao de Pergamino) cerrando este libro que se debe a
que el Pucho se decidió y estaremos
atentos a sus próximas producciones. Las historias están todas en su cabeza, me
reí y me emocioné escuchándolas con la correspondiente aceptación y opinión de
su mamá: Tita.
El "Pucho" Holmer, en
tanto, se refiere a Iriarte en el cierre de la
emocionante introducción de su libro:
... "Por eso quizás éste
ramillete de vivencias, sensaciones, acopio de recuerdos.
Y hasta quizás también,
por incentivo y empujón de algún amigo, léase ROBERTO IRIARTE, que en esto de
embarcarse en asuntos del arte, las locuras y otras yerbas, sabe un rato
largo..."
.
Trataré de que usted y yo
encontremos la punta del hilo de esta historia de circo, de "SOLO "CIRCO" como
subraya Holmer en la página 10: "¡Todos al CIRCO! ¡Hoy Función! Y la gente
subyugada y rendida , independientemente del tamaño de la carpa, ante esas
cinco palabras que llegaban a los pueblos envolviendo y abrigando a grandes y
niños, transportándolos hacia la maravilla de los acróbatas, malabaristas,
payasos, magos. Ni chico ni grande ¿se entiende? solo Circo."
La página 25 muestra una
fotografía del Circo Holdem. Empresa Holmer Del Mauro. Entre 1892 y 1900. En la
pista se percibe en acción al malabarista Aníbal Holmer (bisabuelo). Entre
otras destrezas equilibraba una rueda de carro sobre su frente.
Época de "Circo plantado",
los postes que iban alrededor de la carpa (cujes) no estaban sostenidos por
retenidas y amarrados a estacas, como fue en la década del 60 el moderno Circo
a la americana, estos se enterraban uno por uno, luego se colocaba lo que sería
el ruedo, que al igual que la carpa de arriba, eran de lienzo, no existía la
luz eléctrica, se utilizaba acetileno (el acetileno arde al aire con una llama
caliente y brillante y se utilizaba como fuente de iluminación).
Las páginas 26, 27 y
46 muestran fotos de los bisabuelos,
abuelos y padres de "Pucho":
La página 8 muestra la
foto de una hoja manuscrita por un admirador de la bisabuela Sara Holmer,
fechada el 12 de julio de 1900, cuando el circo Holdem había levantado su carpa
en Porto Alegre (Brasil):
Señorita
Sara E. Holmer
Si sueño en la noche mi
sueño es contigo
Te escucho sonriendo de
amores hablar.
Si busco en mis penas un
nombre de amigo
Tu nombre es el solo que
se pronunciar.
Si acaso en el templo me
prosterno abatido
Pidiendo a los cielos se
duelan de mí,
En medio del ruego mis
males olvido
Y a dios de los buenos
imploro por ti.
Tu aliento es perfume, tu
amor es mi vida,
Tu frente es el cielo más
bello que ví;
En tus labios la risa se
ostenta y se anida;
Los ángeles, Sara, se ríen
así.
Porto Alegre, 12-7-900
Si fuera un dios te
entregaría
Mi amor, mi poder y mi
albedrío,
Y la morada celestial
trocaría
Por un instante... de tu
amor, bien mío.
Todo el libro que le estoy
presentando está compuesto por sucedidos, vivencias de la vida cirquera y
cuentos que le provocarán emoción con lágrimas incluídas. Como la de la
"ecuyere" embarazada, la diferencia entre circo "chico" (rascas) y circo
"grande", el fútbol cirquero, los barquitos en el interior de un camarín, la de
Mirian García (todavía me dura el nudo en la garganta), el de los trapecistas,
el de Zenón García, la chispa de la locomotora ferroviaria que produjo el
incendio de un circo, las payasadas y el agradecimiento a los pueblos...
Si logré entusiasmarlo y
quiere tener un ejemplar, póngase en contacto con Roberto Iriarte:
roberto_i043@hotmail.com
Ricardo
Luis Acebal
Y COMO SI ESTO FUERA POCO, UNA FOTONOVELA