Osîrî che resáî
Quien esto escribe ha tenido -gracias a Dios y a la
Pachamama que le dio permiso- muchas ocasiones para emocionarse hasta lagrimear
escuchando a intérpretes de nuestra música y canto nacional y popular.
Quien eligió vivir respirando con el cuerpo y con el
alma "el aire de aquí" -como diría don Ata- el encuentro con un disco como este
de "Los 34" de Nélida Argentina Zenón (ya cumplió treinta y cinco años su
programa en la filial rosarina de Radio Nacional) sabe que hay que buscar el momento
para poder apreciar a fondo cada uno de los veinte archivos que componen este
redondo, que como todos los suyos es producto de su empeño personal y de
algunos auspiciantes que le dan su apoyo.
La correntina Nélida, rosarigasina por adopción,
habla, canta, vive todos sus días como el pueblo del que forma parte y ese
pueblo se identifica totalmente con ella. En Rosario, donde supo tener su
"Ratonera" don Ernesto Montiel, esta cantora y ejecutante de acordeón y otros
instrumentos "es Gardel". En Buenos
Aires los vendedores de discos la ignoran y los medios radiales llamados
"grandes" no saben quién es. ¡Qué se le va a hacer! ¡Ellos se la pierden!
Si alguien cree que esta nota pretende hacer el
panegírico de una "cantante de chamamé" se equivoca. Lejos de eso, tampoco
pretende "descubrir" a esta señora que, parafraseando al recordado Alberto
Castillo "es parte de su pueblo y le debe lo que es. Canta con su mismo verbo y
habla con su misma voz".
El "momento" llegó. A la sombra de una parra y en
compañía de un amigo y el correspondiente vino tinto, desde "El Carau" (número
uno) hasta "Niporae" (número veinte), pasando por la versión en guaraní de
nuestro Himno Nacional Argentino, las orejas del cuerpo y del alma se abrieron
como para no perderse ningún detalle. Y una vez más quedó demostrado que la
interpretación de lo auténticamente popular no se aprende en ninguna academia.
Nadie mejor que Nélida para emocionarnos con las
historias de Doña Florencia, del Viejo Pedro, de María Perugorria o del último
de los Maidana. Con mi amigo nos dejamos llevar tropeando a Colonia Liebig
junto con un peón golondrina. Descansamos en mi patio y nos deleitamos con uno
de esos chamamé "dedicado a", lujoso como los cogollos de las tonadas cuyanas o
como los floreos de las milongas sureras: "A Gerardo Bond". Vida plena con
aroma de jazminero en las noches correntinas a la sombra de mi padre…
¡Y qué decir de nuestros personajes históricos y
míticos!: Ahí están el Guapo Kunumí que tocaba el tambor en el Ejército de Manuel
Belgrano, el entrerriano Facón Grande, héroe de los obreros masacrados en la
Patagonia del siglo pasado, "los" Antonio Gil, Mate Cocido… Y para que nada del
mundo guaraní quede afuera, la Ca`á Yari, creadora y protectora de los
yerbatales.
El complemento de músicos y cantora es perfecto.
Acompaña a este comentario un detalle de quienes participaron junto a doña
Zenón en esta obra que usted puede solicitarle a su creadora al teléfono
0341-4561742.
A ese número llamé cuando con mi amigo terminamos de escuchar
este Volumen 5 "dos CD en uno" y le dije a Nélida: ¿Cómo se expresa en guaraní
que uno llora de emoción, por ejemplo al escuchar un disco como el suyo? Y me
contestó "osîrî che resáî". (lloran mis ojos)
Ricardo
Luis Acebal.
Músicos invitados: Toto Meza, Monchito Merlo, Coco Zini, Simón Merlo, Daniel Franich, Arnaldo Pucheta, Tadeo Radkowsky, Sergio Martín, Osvaldo Lucero, José Maidana y Nene Maidana.
Coordinación y Dirección General: Gerardo Bond
Logística Operativa: José Suvenciski
Audios de la nota:
1: Antonio Gil (chamamé) de Julián Zini.
2: Facón Grande (chamamé) de Nélida Argentina Zenón.